A veces en muchas ocasiones las personas solemos mirar hacia el lado. Mirando nuestro ombligo, y quejándonos de cosas totalmente banales que a la hora de la verdad si hacemos conciencia de ello, no tienen gran importancia.
Nos dedicamos a compartir, posts en redes "sobre desgracias ajenas", como si realmente nos importarse, pero a la hora de la verdad ¿Quién se preocupa por ello, o hace algo al respeto? Sé que con estos libros solidarios, no cambiamos el mundo y tampoco nos hacer ser mejores personas, pero quejarse es gratis y no lleva a nada, aportar un pequeño grano de arena cuesta poco, y así por poco que sea nos involucramos en algo precioso, y aunque no se llegue donde se debería de llegar, podemos hacer un poco más feliz a alguien, aunque sea solo por saber que hay quienes crean algo hermoso para ellos.
Os traigo tres libros solidarios totalmente diferentes, pero todos ellos con la misma misión.